Carlitos fue todo un personaje – quizás un poco temperamental – a quien debo abonarle que siempre se desempeñó como periodista, tanto en radio como prensa y fue de los pocos que – fiel a su tradición – confió en la prensa escrita, hoy en vía de extinción, pues, sino me cuadran las cuentas en Barrancabermeja, aparte de «El Democrático», el medio de comunicación de Carlos, el resto ya forman parte de la historia de decenas de medios escritos en la ciudad absorbidos por la cultura digital.

Continúa la confusión y la desinformación alrededor de porqué Uribe preso y Santrich libre y no es que el periodismo esté haciendo mucho para despejar dudas.