Quizá, 1.095días de gobierno parezcan poco para arreglar la casa, pero para la actual administración en cabeza de Alfonso Eljach Manrique, los casi tres años han sido tiempo suficiente para mostrar un cambio de chip, y cumplir con una hoja de ruta por la que apostaron más de 55.815 barranqueños en el año de 2019.
¿Es cierto que la Primera Dama, Verónica Alcocer, es una despilfarradora que se la ha pasado viajando al exterior por cuenta del erario. Según los medios (y opinadores en redes) no hay discusión alguna al respecto. Veamos qué tan cierto es entonces. ¿Les parece?
En los servicios de urgencias del Hospital San Juan de Dios aprendimos que había que correr, que había que priorizar lo urgente sobre lo importante, sin olvidar lo último. Las decisiones se medían en vidas humanas. Así deben ser estos primeros días del Gobierno de Petro.
Ángela María Robledo muestra su talante democrático acatando fallo de Corte Constitucional que anula su curul. Con el respeto que tengo por la Corte, lamento esta decisión, tanto por sus implicaciones políticas como por su discutible fundamentación jurídica.
¿Qué significa realmente el “vivir sabroso” de Francia Márquez? Historia de una filosofía del Pacífico que ahora resuena en Colombia.
Yo creo que Elkin Bueno ‘si raspó la olla del presupuesto municipal’, incluso mucho más de lo que pensábamos y contrario a lo que opina Jonathan Vásquez.
Sobre la futura liberación de jóvenes presos en el marco de la protesta social, ni intromisión indebida, ni desconocimiento de la autonomía funcional de la Rama Judicial, por parte del gobierno de Gustavo Petro y mucho menos impunidad.
Fecode históricamente se ha caracterizado por la defensa de la democracia y siempre ha trabajado por el respeto a la pluralidad política e ideológica del magisterio y de los colombianos. Abrimos hilo sobre acciones en favor de la democracia que hemos adelantado:
Un tipo bien santandereano que por accidente le tocó nacer en Barranca y no en Zapatoca —como es su apellido— Helmer Pinilla Galvis, se le ocurrió, arbitrariamente, en 1963, sin consultar a las comunidades, establecer, como si fuera un dictador, que nuestro gentilicio era «barramejo» palabreja de una fonética impronunciable, pasándose por la faja toda nuestra historia cultural ribereña desde inicios del siglo 20 donde se comunicaban llamándose «barranqueño».
El tema del empleo en Barrancabermeja es tan sensible, que si un candidato a la alcaldía anuncia «12.000 oportunidades de empleo», lo menos que puede hacer uno es interesarse por el tema.
