Desde que se creó Aguas de Barrancabermeja se ha generado una cadena de especulaciones en torno a la empresa que no acaban, y lo peor es que con cada nuevo gobernó local algunos promueven la idea de su privatización, no con el ánimo de preservar el patrimonio municipal sino como forma de presionar a la administración, lo que ha generado una especie de clima de incertidumbre permanente que rodea a la empresa.
Y esto no ayuda cuando la empresa enfrenta problemas de funcionamiento, de captación de agua, de potabilización, y de distribución del líquido para el consumo en el distrito, entre otros.
Muchos de esos problemas no son nuevos, y lamentablemente no ha sido posible resolverlos, así que la confiabilidad del servicio de agua potable es constantemente puesta en duda por diferentes comunidades en el distrito.
Superando el cuento de la privatización, que por culpa de aquellos que cada cierto tiempo reciclan el rumor y que han terminado como el pastorcito mentiroso, y más bien se han convertido en parte del problema por su manipulación mediática.
Hay que revisar la situación de la empresa, analizar sus problemas y sus potencialidades, para poder pensar cual es el futuro de Aguas de Barrancabermeja.
Hay un contexto ambiental preocupante con varios factores que amenazan no solo ecosistemas locales sino la sostenibilidad ambiental de la producción de agua potable para el distrito.
A esto hay que sumarle sectores políticos que han buscado ganar ventaja electoral usando estas amenazas para su provecho, dejando de lado la búsqueda de soluciones y promoviendo un debate politiquero.
En este sentido es indispensable señalar que el futuro de la empresa depende de decisiones que se deben tomar sobre la captación de agua y el ecosistema que se va a ver afectado.
La actual fuente de captación de agua, la ciénaga San Silvestre, tiene varios problemas de contaminación, sedimentación, desforestación, entre otros, que deben ser tenidos en cuenta, y deben ser resueltos tanto para preservar ese cuerpo de agua que es fundamental para el distrito, como para garantizar una fuente confiable, ecológicamente sostenible y limpia de agua para Barrancabermeja.
Además, es indispensable analizar con responsabilidad si se debe buscar otra fuente y tomar las decisiones de forma rápida, para así evitar afectaciones a la comunidad.
La empresa misma tiene dificultades en su capacidad operativa y en su sostenibilidad financiera.
Hay que señalar que desde su creación Aguas ha venido fortaleciendo y mejorando su operación, pero la falta de recursos ha limitado la posibilidad de resolver las diferentes dificultades y limitaciones técnicas que tiene la empresa y que se reflejan en problemas de confiabilidad en su producción de agua potable.
Las quejas de la comunidad son permanentes desde su nacimiento y aunque hay mejoras no terminan de presentarse, lo que demuestra los problemas que tiene la empresa.
Además, hay que señalar que hay conexiones ilegales, perdidas del producto, una cartera amplia, parte ella de difícil cobro, que debilitan el recaudo y las finanzas de la empresa, que requiere ese recurso para hacer las inversiones que necesita para mejorar su operación y su confiabilidad.
Otro elemento que debe ser considerado es su relación con la administración distrital.
Hay elementos por fuera de la gestión de la empresa que inciden en su manejo. Han sido constantes las acusaciones y señalamientos sobre el manejo de la entidad y su contratación, algo que está ligado con el gobierno distrital y con la forma como se desarrollan las relaciones entre entidades.
Las presunciones y rumores generan un clima de incertidumbre que para nada favorecen la gestión de la entidad y dificultan decisiones que se toman en la misma.
En todo este contexto es necesario analizar la realidad de Aguas de Barrancabermeja para empezar a direccionarla hacia donde la comunidad la necesita. No es viable que en pleno siglo 21 no haya confiabilidad en el agua potable del distrito, y se hace necesario que se revisen los procesos de la empresa pero también los canales de distribución del producto, y debe ser indispensable cambiar la tubería de manera urgente donde sea necesario.
Hay que considerar la sostenibilidad ambiental de la captación de agua, así como se va a hacer con las aguas servidas con la PTAR, que debe integrar un plan de recuperación ambiental de la ciénaga San Silvestre y la búsqueda de una nueva fuente de captación, lo que debe hacerse de manera urgente para implementarse en poco tiempo.
La estabilidad financiera de la empresa debe mejorarse, eso lleva a mejorar el recaudo y el cobro, disminuir las conexiones ilegales y sancionar a aquellos que causan daños en las redes.
También se hace necesario fortalecer el recurso humano y evitar la politización de su administración, optimizando el gasto y la inversión que se hace desde la entidad.
En ultimas integrar a Aguas de Barrancabermeja en el gobierno distrital, pues finalmente es una empresa pública del distrito, y debe articularse de manera cercana a las secretarias de Planeación, Medio Ambiente, Infraestructura y Desarrollo Económico con el fin de que sea orientada a las necesidades y realidades del distrito plasmadas en el POT, en los planes de desarrollo y otros documentos de planeación.
Además se hace indispensable un mayor control de su funcionamiento y gestión, que debe llevar una permanente rendición de cuentas y mayor información a la comunidad, para conocer realmente la realidad operativa y financiera de la empresa, y así evitar especulaciones y suspicacias.
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