Por: Oscar Miguel Rodao
Sin lugar a dudas el ganador de las pasadas elecciones en Santander fue el partido liberal con el gobernador Horacio Serpa como responsable directo de este renacer de la primera fuerza política del departamento.
Gracias a su labor ordenada y transparente al frente de los destinos de la gobernación, el pueblo santandereano acompaño a su partido y se quedo con una alta cuota de representatividad en el congreso tanto en cámara con tres curules y senado con cuatro, este es el premio refrendado en votos a una administración que está decidida a sacar adelante el departamento luego de encontrarlo quebrado y lleno de deudas. Gracias a la labor de Serpa Uribe hoy nuevamente Santander es un departamento importante en el escenario nacional, rentable social y económicamente, ordenado y con una visión positiva y futurista, demostrando que desde Santander se hace país.
Junto a Horacio Serpa, desde luego también debemos resaltar la laboriosa y juiciosa tarea de nuestro secretario de agricultura departamental, Darío Echeverry Serrano, quien de manera responsable, ordenada, silenciosa ha venido impulsando y concretando todas las iniciativas que hoy tienen a nuestro departamento con un claro y positivo avance hacia el desarrollo después de haber superado la profunda crisis en que lo recibieron de la pasada administración departamental.
Otros ganadores sin lugar a dudas fueron el representante Mario Suarez y el senador electo Jaime Duran quienes barrieron a nivel departamental y de paso se comprometieron ampliamente con la ciudad en temas tan importantes como la creación del Distrito Petrolero y la presidencia de Ecopetrol para un santandereano, cosas que no son imposibles ya que en el pasado reciente han podido colaborar para que hijos ilustres estén hoy en día en cargos como la Registraduria, la Defensoría del Pueblo y la Procuraduría Provincial, junto a ellos ganan: el presidente del directorio liberal Alfonso Baeza Acuña, el médico Hernando Flórez Anaya y el arquitecto Alberto Cotes Acosta del Instituto del Pensamiento Liberal barranqueños que de manera responsable supieron entender la realidad política del departamento y le apostaron al progreso y al desarrollo de la ciudad basado en realidades y no en sueños o aventuras electorales.
Nuevamente, gracias a la gran victoria liberal en Santander, Barrancabermeja después de varios periodos electorales, vuelve a tener un representante hijo de esta tierra.
Con la aplastante votación del domingo, Jorge Gómez Villamizar, le cayó la boca a más de un político saltarín y de paso nos dio la razón cuando en diciembre escribimos un artículo titulado “Hagan sus apuestas” en donde hacíamos referencia a la fortaleza electoral que siempre muestra cuando participa en unas elecciones, sin lugar a dudas un “toro” de la política local.
Felicitaciones le mandamos desde estas líneas y le deseamos éxitos en estos cuatro años, el trabajo serio y bien estructurado que se vio reflejado en una gran votación que devuelve a Barrancabermeja una representación en el congreso.
Con Jorge Gómez estuvo el concejal Néstor Riaño Galvis, quien en esta ocasión se anoto un hit, lo mismo que el grupo de Juan Carlos Rueda Zapata ex candidato a la asamblea departamental.
También ganaron el Partido Verde, quienes sin grandes sumas de dinero posicionaron a Álvaro Pérez Vides con una votación en solitario y Wilfrido Usurriaga Aponza que se metió al Congreso por este partido, y por supuesto el senador Robledo del Polo Democrático, otro premiado por su magnífica labor en el Congreso, desde donde demuestra que la claridad ideológica y la labor juiciosa es premiada por los ciudadanos con votos.
Por el lado de los perdedores, pierden las uniones oportunistas con discursos incoherentes que llamaban a una falsa unidad donde el pueblo no fue incluido, pierden, los miembros de la ultra derecha política militando por conveniencia, sin el menor rubor, en la izquierda.
Pierde los políticos de estomago que saltan de partido en partido, en cada elección, pierden las voces separatistas que pretendían aislar la ciudad del resto del departamento, pierden las campañas arrogantes. Pierden las campañas triunfalistas, con grandes cierres de campaña, sobradores que juntos solo demostraron que también se podían volver a quemar, y que no se dan cuenta que la política cambio y que las viejas estrategias de pomposidad y ríos de dinero ya no calan en los ciudadanos que quieren una democracia verdadera e incluyente.
Otro gran perdedor es el alcalde de la ciudad, Carlos Contreras López, quien salió a contarse y le termino yendo como los perros en misa, con todo el aparato y los ríos de dineros, camionetas de contratistas, vallas y la acción amenazante sobre los empleados, volvió a los mismos votos del 2002, se demuestra una vez más que el desorden y la inoperancia en la que vive la actual administración es rechazada por los ciudadanos quienes ven como cada año se quedan sin ejecutar los recursos que podrían salvar vidas, y hacer obras para generar empleo, mientras el alcalde se gasta chorros de dinero en publicidad, y programas de televisión con periodistas con honorarios estrambóticos, el pueblo demostró que cobra por ventanilla la ineficiencia de sus gobernantes.
Sin embargo en política no hay nada escrito, ahora con los resultados de las elecciones, se hace necesario recomponer las cargas y tender un puente para devolver la doctrina y el pensamiento liberal a las juventudes, los sectores abiertos y sociales de la ciudad, porque en el fondo hay algo cierto que debe preocuparnos a todos, la gente está mandando un mensaje claro y es que se canso de los candidatos sin propuestas y sin ideología, que se canso de los que se hacen elegir para el beneficio propio y no trabajan por el bienestar real de las comunidades, retomar esa esencia debe ser la gran reflexión para los premiados ganadores y los castigados perdedores.