El miedo que aún persiste
Por: Hernando Flórez Anaya
Después de tantos años de violencia, de violación de nuestros derechos humanos por parte de todos los grupos ilegales y sin conocer la democracia, se respira un profundo miedo a ese pasado y se siente en el ambiente un temor a que esas épocas vuelvan.
Y es que los estragos de esos años aún subsisten, la nuestra es una sociedad fracturada y con una débil institucionalidad que muchas veces se confronta más de lo que se une, pero más allá, el tejido social quedó profundamente averiado, pululan los problemas en los niños abandonados sin colegio y sin educación, mujeres menores de edad embarazadas, mujeres abandonadas que no creen tener futuro ni esperanza, hogares sin padres a quiénes la violencia arrebató sus vidas; intolerancia que se traduce en todo tipo de actos violentos y muchos otros que hieren y lastiman nuestra sociedad, y que no hemos podido pese a toda la bonanza paliar o minimizar, ese profundo dolor vive aún en nuestros corazones y en nuestras almas.