Después de pensarlo, decidí hacerlo. Hoy hubo todo un revuelo en redes sociales porque una supuesta periodista de BLU Radio, medio para el que trabajo, estaba invitando a marchar en Cali contra el presidente Gustavo Petro.
Inicialmente, quiero aclarar que la mujer era una de las líderes de la protesta y era mi entrevistada.
¿Por qué sostenía el micrófono? Porque lamentablemente soy un ser humano, igual que todos aquellos que se creen con el derecho de juzgar y, además, un ser humano que tiene que hacer varias tareas a la vez para cumplir con sus responsabilidades.
Para los que se creen dueños de la verdad, les contaré lo que tenemos que vivir los reporteros casi a diario: Con una mano sostenemos la comrex o el equipo de trasmisión
En la misma mano tenemos el celular corporativo con una aplicación para poder salir al aire por si la señal falla, con la otra mano sostenemos el celular personal que graba mejor los videos para poder mover las redes digitales, además con ese mismo celular tenemos que estar pendientes de todo lo que nos escriben y las directrices que nos dan y adicional, vamos escribiendo la nota web.
A esto, se suma que tenemos colgado el maletín personal en el que llevamos agua, algo para comer si la jornada se hace larga, audífonos, micrófonos cables y otras cosas.
Pero eso no es todo, también andamos con el maletín de la empresa con más cables, micrófonos, baterías, etc.
El trabajo del periodista en la calle es poco valorado por la ciudadanía y por los jefes, que desde su cabina, su escritorio y hasta su casa transmiten tranquilamente ganándose un buen sueldo, mientras que la labor del reportero de la calle, el que se mama el sol y la lluvia, los insultos y otras cosas, queda en el olvido y es mal pago.
Haces el trabajo de cinco personas por el salario de una
Prácticamente haces el trabajo de cinco personas por el salario de una y con equipos muchas veces deficientes.
Así como los medios evolucionan, los periodistas tenemos que hacer lo mismo. Cumplir en digital, cumplir con audios, cumplir en vivo, llegar al punto de transmisión muchas veces hasta con dos horas de anticipación
Para que nos den un paso de veinte segundos, tres horas después. Perdiendo tiempo valioso que se pudo ocupar en buscar más temas o contenido para los noticieros locales y nacionales. Y ni hablar de los horarios, por ejemplo:
¿Trabajaría usted todo el fin de semana de 5 de la mañana a 10 de la noche reportando noticias cada hora?
Muchas veces no tenemos tiempo de desayunar, de almorzar, o las dos. Muchas veces tenemos que pasar horas y horas sentados en el piso ante una coyuntura esperando que algo suceda y aún así, mantenemos la sonrisa, entre nosotros buscamos la forma de hacer la jornada amena en medio del estrés nos reímos, muchas veces tenemos que salir al aire ya sea en radio o televisión sin titubear, mientras estamos pasando por un mal momento personal y tenemos un nudo atorado en el cuello.
Y pocas veces, es más, puedo decir que ninguna, los superiores te felicitan cuando algo te sale muy bien.
En los medios no se valora cuando te quedas varios días en otra ciudad con la misma ropa sudada después de una jornada de corre-corre, lejos de tu familia buscando marcar la diferencia en el contenido para que la empresa sobresalga.
Sin embargo, ante el más pequeño error, los regaños no se hacen esperar y la lavada de manos ni se diga.
A pesar de esta situación, que muchos vivimos en las diferentes profesiones que desempeñamos, la gente que no se toma el tiempo de escuchar, verificar, analizar y utilizar el sentido común, prefiere primero abrir la boca y luego pensar.
Aunque a veces esta última parte ni siquiera la practican, porque les encanta creerse expertos en cuanto escándalo hay.
Y quiero aclarar, que ni en este ni en los demás medios en los que he tenido la oportunidad de trabajar me han censurado o me han pedido manipular la información con X o Y preferencia.
Las personas ven lo que quieren ver y tenerlas contentas a todas es muy difícil.
También contarles que, a pesar del regaño, no me han echado. Sin embargo, en cuanto tenga la oportunidad de un empleo seguro, mejor remunerado y en el que se valore realmente al colaborador, me iré.
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Paula Andrea Suárez es una periodista que puede ser localizada en Twitter como @paulasuarez308 – Periodista en @BluRadioCo
Texto original tomado de la cuenta @paulasuarez308
