Por: Andrés Miguel Sampayo
Faltan nueve meses para que termine otro periodo de la alcaldía de Barrancabermeja. El personaje que ocupó el palacio municipal durante los últimos 4 años, del que se pensaba iba ser el gran artífice de los cambios de la ciudad, resultó ser más de lo mismo. Este corrió con mayor fortuna con respecto a los antecesores, pero no por sus labores para proponer y ejecutar obras, sino porque el sector privado local, acompañado de las empresas que han llegado, andan imparables, lo que mimetizó sus actuaciones, y que lleva a que la sociedad barranqueña, ignorara sus actuaciones.
Ante esta situación, voy a exponer casos simbólicos y llamativos, en donde se utilizaron recursos de nuestros impuestos, y que fueron gastados en adefesios. El primero, en el parque Camilo Torres, conocido por el argot popular como el parque el descabezado. Ese parque duró cerrado un tiempo. Al ver que lo estaban interviniendo, pensé ingenuamente que iban a realizar una obra arquitectónica, que convertiría a la zona, en un lugar importante para visitar por los locales y por los que nos visitaran. Grueso error de mi parte, mandaron a construir unas materas de mal gusto estético, que raya con lo ordinario, con unas plantas bastantes descuidadas. Ante eso, la pregunta es, quién fue el arquitecto o paisajista tan incompetente que contrataron para eso, y no solo eso, cuánto se gastaron en semejante tosquedad. Otro ejemplo es el paseo del estudiante, más se demoraron en terminarlo, cuando las zonas de agua, las estaban clausurando, en vez de buscar una manera de hacerla funcionar todo el tiempo, la solución fue apagarla. La pregunta es, cuánto dinero se gastaron en la zona donde quedaron las fuentes.
Por último, la fuente del parque de la vida, que aunque no fue obra de la administración vigente, a quién se le ocurre colocar una matera ahí y hacer desaparecer el agua. Les quiero recordar que en Barrancabermeja la temperatura promedio, se ubica por encima de los 30 grados, siendo esta la situación, no entiendo porque no se prioriza el agua en los parques públicos, y empezamos una campaña para que estos mismos sean cuidados por la población. El agua no puede ser reemplazada por materas, como los arboles tampoco deben ser reemplazados por cemento.
