Editorial El Medio Magdalena
Después de finalizado el proceso electoral y en los últimos instantes del actual gobierno local, es indispensable hacer los balances de estos cuatro años de gobierno, tanto para evaluar lo sucedido como para encontrar errores y sacar lecciones de este cuatrienio.
Es claro que toda evaluación de un proceso no es tarea sencilla, por más rápida y superficial que sea, pero es indispensable analizar los grandes temas que conciernen la atención de toda la comunidad para ir haciéndose una idea de lo sucedido con el burgomaestre local y su gestión al mando de la administración municipal en este periodo de gobierno próximo a culminarse. Se podría empezar a revisar este gobierno por temas, empezando por el tema del agua, señalando que en esta materia se inicio un proceso importante para la ciudad, que se viene desarrollando junto con Ecopetrol y la Gobernación, que manifiesta un punto que se destaca en la gestión del alcalde Contreras. Sin embargo vale la pena señalar los problemas en la calidad del servicio que ni la empresa prestadora del servicio ni el mismo alcalde han podido solucionar. Siguiendo con el área de infraestructura, vale señalar las inversiones en varias escuelas y colegios públicos, el CAIF, la pavimentación y arreglo de algunas vías, la construcción de vivienda en altura, los mejoramientos y la legalización y titulación de predios, que son los ejemplos de gestión en esta materia del alcalde. En el tema social, las inversiones dirigidas a la población discapacitada y desplazada deben destacarse, en educación se hicieron avances importantes en cobertura, así como el apoyo a las fiestas de la ciudad y al reinado del Petróleo, que han permitido que importantes artistas visiten la ciudad y puedan ser apreciados por la comunidad porteña. Esto es a vuelo de pájaro los logros de cuatro años de gestión, hechos que revelan el pobre desempeño del actual mandatario.
Lamentablemente han sido más los problemas y las decepciones para la comunidad, y esto se puede constatar al revisar áreas como la de infraestructura, pues la mayor parte de las vías están en un pésimo estado, la señalización es pobre, el deterioro de andenes y parques es evidente. Así en educación a pesar que se hicieron inversiones en infraestructura, aun hay deficiencias en esta materia, y los problemas en programas como el de alimentación o transporte escolar hace más notable el retroceso en esta área. Pero lo más lamentable es la baja calidad de la educación en el municipio, lo que representa una verdadera crisis educativa para Barrancabermeja.
En salud las quejas en la prestación del servicio de primer nivel se mantienen. En vivienda, los avances en construcción de vivienda han sido pocos a pesar de las ingentes necesidades locales. En deportes la crisis de las escuelas de formación deportiva, la falta de apoyo a los deportistas, los constantes problemas en Alianza Petrolera y el lamentable estado de los escenarios deportivos, representan una radiografía de la crisis del sector.
En el área del empleo la situación sigue siendo lamentable, la contratación de la mano de obra local sigue siendo un problema sin solución, los ejemplos son abundantes empezando por al administración municipal que se destaco por contratar mano de obra foránea, además de la política publica de empleo que ha sido cuestionada tanto por los trabajadores como por los gremios económicos.
En el tema de movilidad el fracaso ha sido mayor, las decisiones tomadas por el alcalde no han hecho sino afectar a los ciudadanos y no han permitido disminuir o siquiera controlar el transporte informal, a lo que se debe sumar el deterioro de vías y los daños ocasionados en las mismas por diferentes contratistas, además de las fallas en la señalización y los semáforos, la deficiente gestión de los agentes de tránsito y los problemas de rutas en el transporte colectivo, revelan la falta total de resultados en movilidad del alcalde Contreras.
Y ni hablar de temas como la cultura, donde el apoyo a las ferias y fiestas tradicionales ha sido cuestionado por las mismas personas que promocionan esos eventos, ejemplos como lo sucedido con el festival del bollo o del dulce. o el apoyo a artistas locales y a los gestores culturales, o el uso de los recursos en esta área ha sido cuestionado por los mismos actores del sector. El ejemplo más triste pero emblemático ha sido el tratamiento al antiguo hospital (donde funciono la Inupaz) donde la falta de gestión del alcalde impidió que se avanzara en la recuperación de este patrimonio de la ciudad.
Y esta mirada rápida de algunos temas revela la deficiente gestión del gobierno local y se puede constatar que estos cuatro años de gobierno han sido al menos un fracaso para la comunidad de Barrancabermeja que confió en Carlos Alberto Contreras como alcalde. Esperemos que la ciudadanía haya aprendido algo de este gobierno.