Por: Gustavo Arciniegas Ocampo
Hoy me voy referir a un aberrante caso de corrupción que ya algunos medios de comunicación han venido tratando en los últimos días. En la administración municipal que dirige el señor, Carlos Contreras, están pasando cosas muy graves. Me voy a referir al Convenio # 1005 del año 2009 ejecutado por 190 millones de pesos, firmado entre una organización que dice ser «sin ánimo de lucro» y la doctora Yaneth Mojica Arango, Secretaria de Desarrollo Económico y Social, contrato que amerita, de acuerdo a las primeras pesquisas, una investigación por cuenta de la Fiscalía General de la Nación.
Lo primero que sorprende de este «Convenio» es la razón social de la entidad contratista, que dice llamarse, ASOCIACION JUVENIL DE BAILE MODERNO, y cuyo objeto es «el de fortalecer las escuelas de alto rendimiento artístico». Investigaciones periodísticas adelantadas por varios colegas en la ciudad, (entre las que se destaca el informe de la comunicadora social, Patricia Rojas), han comprobado que la gran mayoría de personas y entidades que aparecen planilladas cobrando aportes de este contrato, dicen jamás haber recibido dinero alguno. Es decir, nadie da una razón clara y exacta de lo que pasó con esos 190 millones de pesos.
Pero mientras existe una total incertidumbre frente al destino final de esos recursos, (me refiero a los 190 millones de pesos), la gente en la ciudad observa asombrada, sorprendida y estupefacta como, detrás del trono, escondido, está muerto de la risa un ex aspirante al Concejo de Barrancabermeja, que formó parte del grupo de líderes que apoyó en las elecciones del 2007 al hoy alcalde Carlos Contreras, ex aspirante a quien todos le atribuyen unas extraordinarias cualidades como bailarín de minitecas.
Pues bien, ese caballero hoy se pavonea orondo por las calles de la ciudad, en una camioneta 4 puertas y en lujosas motocicletas de alto cilindraje, sin que exista una justificación de donde provienen esos repentinos y fortuitos recursos, especialmente si en Barranca todo el mundo lo conoció pobre, necesitado, humilde y carente de dinero para darse esos nuevos lujos que viene ostentando, precisamente, desde el año 2009 cuando se firmó el controvertido Convenio.
Lo que últimamente viene sucediendo en nuestra ciudad, es que algunos personajes ladinos, astutos y con extraordinaria habilidad para encarretar a los más bobos, vienen utilizando de mampara la palabra «Cultura», para exponer proyectos y programas que no cuentan con ningún fundamento ni soporte científico, sociológico ni antropológico. Son personajes que, contando con el respaldo de gobernantes corruptos, firman Convenios grotescos que, lejos de contribuir con el enriquecimiento cultural de los pueblos, terminan es por enriquecer el bolsillo de ellos mismos, que repito, aparentan ser «gestores culturales». No se fortalece ninguna escuela de alto rendimiento, se fortalece es el bolsillo del vivo de turno.
Creo, llegó la hora que la Fiscalía General de la Nación en Barrancabermeja entre con vigor y energía a investigar todas estas dudas, sospechas y suspicacias que existen alrededor de este Convenio para que no nos llevemos una sorpresa y vaya ser que desde la Secretaría de Desarrollo Económico y Social se esté patrocinando una cueva de malandrines que fungen de «promotores» artísticos con el único objetivo de robarse la plata.
Por ejemplo, que se miren y analicen las cuentas bancarias del ex aspirante al Concejo de marras, para poder establecer las fechas exactas de los movimientos de dinero, observando repentinos e inesperados ingresos que, eventualmente, no se ajusten a su normal estilo de vida; además, que se llame a los supuestos beneficiarios de ese Convenio para saber si recibieron dinero y en que lo invirtieron, pero sobre todo que se investigue al ciudadano Emérson Paolo Díaz García, quien aparece como el firmante del Convenio, y diga todo lo que sepa.
En este fétido «Cartel de los Bailarines» no hemos visto resultados concretos que nos demuestren que se aumentó la riqueza cultural de Barrancabermeja, porque al final en estos «Convenios» los rendimientos culturales son «intangibles» y así, de acuerdo con la estrategia de los corruptos, es más fácil disgregar y embolatar las ganancias. «La cultura es etérea, irreal y abstracta», me decía hace una semana un ciudadano que aún no sale del asombro al conocer detalles del Convenio.
A mi me gusta hablar claro y cuando quiero decir las cosas, no me refugio en matáforas barrocas que enturbian la comprensión de lo que trato de manifestar, por eso, antes de finalizar este comentario quiero dejar en claro que si la Fiscalía abre una investigación formal en contra del «Cartel de los Bailarines», muy seguramente se presentarán costos políticos que repercutirán en las próximas elecciones del 2011.
Hoy, por cuenta del «Cartel de los Bailarines», la Secretaria de Despacho y dama de confianza del alcalde Carlos Contreras, de resultar investigada, debe declinar, el próximo año, a ser candidata a la Alcaldía de Barrancabermeja.
Para que mis lectores conozcan el documento del Convenio # 1005 del año 2009 por 190 millones de pesos y aprovechando los recursos que brinda el internet, les sugiero que pulsen «AQUI» y lean la forma en que se están manejando los llamados «Recursos Sagrados del Municipio» y de los que tanto habla el alcalde de Barrancabermeja, Carlos Contreras López.
Bienvenidos al tristemente célebre «Cartel de los Bailarines».
NOTA: Al periodista Gustavo Arciniegas Ocampo se le puede escribir al correo [email protected] o llamar telefónicamente directo a su celular 312- 316- 6624
Las opiniones publicadas aquí son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores y no necesariamente responden al pensamiento o punto de vista de Barrancabermeja Virtual.
