Inicio Mario Valencia Ciudad del caos II

Ciudad del caos II

darioPor: Darío Echeverry Jr.

Otro ejemplo más de esta ley del más fuerte que impera en Barrancabermeja es la seguridad. Aunque duela decirlo, el puerto petrolero no es precisamente el ejemplo de tranquilidad, los últimos decenios han sido ejemplo de violencia creciente, desmedida e indiferenciada, que ha afectado a muchos ciudadanos, y en muchos casos enlutando a muchos hogares, marcando profundamente esta comunidad.

Pero paralelamente a los embates del conflicto, la ciudad ha venido sufriendo de manera cada vez más creciente de crímenes de todo tipo que afectan la convivencia. los robos a residencias, los asaltos a mano armada, los robos callejeros, por solo mencionar algunos casos sobresalientes se han venido convirtiendo en el pan de cada día para los habitantes de esta ciudad, que inermes deben sufrir las acciones de los criminales. Pero lo peor del asunto es que, como muchos otros problemas, el gobierno local carece de una política publica que le permita enfrentar esta realidad social, y termina por apoyarse en el accionar de la fuerza pública, que como se ha demostrado es temporal y no necesariamente coincide con las necesidades y dinámica social.

La realidad muestra que estos años de bonanza económica, si se me permite el termino, y los que vienen convertirán a la ciudad en un punto de referencia para la delincuencia, y hasta el momento ni siquiera se ha iniciado una discusión seria entre los partidos políticos, organizaciones sociales y comunitarias, fuerza pública y administración municipal sobre cómo afrontar lo que se viene. Y no es exagerado decir esto, sobre todo cuando a plena luz del día en barrios residenciales son comunes los robos a mano armada, y si se tiene en cuenta las próximas inversiones en la ciudad, la ciudadanía debe exigir prontas medidas al gobierno municipal para evitar futuros dolores de cabeza, al tiempo que se disminuye la inseguridad actual.

El actual estado de naturaleza en que está inmersa Barrancabermeja, evidente en esa ley del más fuerte que impera en las calles y barrios, solo puede ser superado con una administración municipal legitima que actúa garantizando los derechos de los ciudadanos al tomar medidas serias y racionales, de acuerdo a una política pública, para atacar los problemas que afectan el conglomerado social, de lo contrario seguirá todo como está ahora o empeorara, pues si las autoridades municipales ignoran se vienen varios años de inversiones, que traerán mas vehículos, personas, empleos, delincuentes y problemas.

Comments

comments