La Inspección de Tránsito y Transporte de Barrancabermeja se ha caracterizado por estar siempre al borde de la quiebra, desde hace varios años esta entidad enfrenta una crisis financiera, producto de los presuntos focos de corrupción que existen ahí, tanto en la parte administrativa como operativa (agentes de tránsito).
El pasado 10 de octubre, se ha publicado en la página de Contratación del Estado – SECOP II – el proceso de Concurso de Méritos para contratar la INTERVENTORÍA TÉCNICA, ADMINISTRATIVA Y FINANCIERA AL CONTRATO DE CONCESIÓN N° 068 DEL 2017 ENTRE EL CONSORCIO STB Y LA INSPECCIÓN DE TRÁNSITO Y TRANSPORTE DE BARRANCABERMEJA – ITTB.
Llama poderosamente la atención que por este proceso, no se haya oído ni una palabra por parte de los Sindicatos que hacen parte de la ITTB, en otrora acuciosos y pendientes – con lupa en mano – vigilando todas las iniciativas, proyectos y programas de anteriores gobiernos, en donde montaron “Carpas De La Resistencia”, hacían plantones y presentaban denuncias en todos los organismos de control.
¿Por qué será?
¿Acaso hay «mermelada» para ellos?
Señalan los documentos de este proceso colgado en el SECOP II, que:
“Es importante señalar que el personal actual de la ITTB tiene responsabilidades propias de sus roles laborales, lo que a menudo genera una sobrecarga que dificulta la efectividad de la supervisión de estos servicios. Por ello se hace esencial la contratación de una interventoría externa, que garantice eficacia, transparencia y beneficios tanto para la entidad como para la comunidad. Esta intervención es clave para asegurar un seguimiento adecuado y un servicio de calidad, promoviendo así la confianza y satisfacción de los ciudadanos.”
«Mejor dicho, apague y vámonos», como dicen en Barrancabermeja cuando se observa algo insólito
La administración actual de la ITTB, pone en un documento oficial, que la gestión de sus funcionarios que supervisan la Concesión de trámites, de conductores, infractores y de tarjetas de operación , tan «criticada» por los funcionarios en el pasado y tan cuestionada – igualmente – por el actual director de la Entidad, presenta: «deficiencias en la supervisión de los servicios».
El plazo de ejecución de este contrato de Interventoría es hasta que culmine la concesión hecha en 2017, y su valor es indeterminado. Para “justificar” la interventoría, se sacan de la manga el «otro si» 7 de la concesión N° 068 de 2017, que señala
“Para el pago correspondiente de la detección electrónica, se tendrá en cuenta que la distribución será semanal, en virtud de la cual primero se deberá realizar las transferencias del valor establecido por la ley para el Sistema Integrado de Información de Multas y Sanciones por Infracciones de Tránsito (SIMIT) correspondiente al diez por ciento recaudado.
Seguidamente se distribuirá el 90 % restante, un tres por ciento (3 %) para la interventoría, el treinta y ocho con 8 décimos (38,8 %) por ciento a la ITTB y el restante cincuenta y ocho con dos décimas (58,2 %) por ciento para el concesionario”.
Asunto este que NUNCA se estableció en la Concesión (de ahí el Otro Sí) y que va en detrimento de las arcas de la Inspección, puesto que ese 3 % sale de lo que inicialmente le correspondía a la entidad.
¿Y qué dicen de todo esto los sindicatos de la transito?
Los funcionarios, y en especial los sindicatos de la ITTB ni se inmutan ante tamaño negociado.
¿A quién beneficia este entuerto?
Dicen las malas lenguas que el asunto es para una ex congresista muy afín al actual Director de la entidad.
Otros dicen que este entuerto es de los mismos dueños de la Concesión, que quizás ven la oportunidad de asegurar una plática, sin los vaivenes de la economía local.
El jueves 7 de noviembre se abre la Caja de Pandora
Amanecerá y veremos
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