Mi querido Daniel Samper O, qué curioso esto de que los lodazales políticos nos tengan tan distanciados en nuestro modo de pensar.
Vos te debés preguntar, “pero, ¿a esta mujer qué le pasó?” (Nunca me olvido de que me diste la primera oportunidad de escribir en un medio público [Soho] y que jamás censuraste mis diatribas feministas contra esa revista ultra machista).
Mi interés no es tanto defender las rarezas retóricas de Gustavo Petro (aunque me fascina que provoque y que se salga del discurso acartonado y formal, me parece una señal de inteligencia, ya ves), sino al proyecto de país y de mundo que propone.
Le puede interesar: Oposición le apuesta a una Procuraduría de bolsillo de Germán Vargas y Cambio Radical
Un país “potencia mundial de la vida”, ese eslogan del cual te burlas tanto, a mí me parece que comprende un modelo posible y hermoso de nación que debemos seguir eligiendo en cabeza de otros líderes, para que sigan limpiando las instituciones corruptas, como lo están haciendo los funcionarios de este gobierno con Carrillo, Alexánder López y Bolívar.
Un país que empiece a desmontar el clasismo detestable que a veces detecto en vos y en mí misma; un país antiguerra, poblado de universidades públicas nivel estrato seis para todos los jóvenes colombianos.
Un país que prospere a partir de una economía solidaria, un país no estratificado en clases sociales donde sólo los muchachos de clase baja se van al monte a luchar por la “Patria, la Vida y el Orden” de los estratos seis.
Un país con ferrocarriles (sí como ese larguísimo que te hace gracia) y en el cual la salud y la educación son derechos fundamentales y no servicios privados.
Le puede interesar: ¿Con Cambio Radical, se va a poner al ratón a cuidar el queso?
El presidente propone eso y no sería una utopía si le copiaran más los banqueros y los empresarios poderosos de la derecha, y ese poder económico y político cebado en el narcotráfico que este gobierno golpea diariamente incautando cargamentos de droga (no me extraña que eso tenga al país “descuadernado” como dijiste hace unos días).
Si esos poderes le copiaran al presidente, estaríamos en el camino de ser un país ejemplar en la región.
Yo no veo brutalidad ni idiotez en intentar eso una y otra vez con la tozudez de un loco. Hay que estar loco para plantarle cara a décadas de gobiernos oligárquicos, mafiosos y al poder bélico mundial.
Siempre apoyaré esa forma de delirio, lo más sabio que le he visto proponer a un gobernante colombiano.
Fuente: Escrito de Margarita Rosa de Francisco en la red X 16 de septiembre de 2024