Por: Hernando Flórez Anaya
No cabe duda que nuestra relación con Bucaramanga es cada día más estrechas en lo económico, social y cultural, mucho de nuestro desarrollo se está dando por la inversión de importantes empresarios de la capital de nuestro departamento, todo esto hace que nuestra comunicación sea cada vez más importante, y para ello necesitamos de una vez por todas una carretera que nos comunique rápida pero seguramente.
Desde que la naturaleza destruyó parte de la carretera se viene clamando por una solución a largo plazo, es innegable el esfuerzo del gobernador, Dr. Horacio Serpa Uribe y del alcalde municipal, Dr. Carlos Contreras López, en insistir ante el gobierno nacional para una solución a este problema que nos mantiene en incertidumbre constante, ya no sabemos que día la carretera va a estar abierta o que día va a estar cerrada.
Es inconcebible que se hable de tantos megaproyectos para la ciudad y que nos mantengamos en incertidumbre constante para comunicarnos con nuestro más importante socio comercial como lo es Bucaramanga, pareciera que al gobierno nacional nada lo inmuta con respecto a este tema, si toda la sociedad barranqueña no se levanta a protestar enérgicamente y acompañamos a nuestros gobernantes, vamos a tener este inconveniente por largo tiempo.
La historia tristemente se repite, pareciera que la única forma de que ciudades como la nuestra sea escuchada es a punta de protestar, no pareciera una lógica normal pero desgraciadamente los acontecimientos nos han demostrado que ese es el camino por el cual nos oyen, así que entre más voces pidamos una solución definitiva a este problema, más oportunidad tendremos de lograr el objetivo de una comunicación acorde a la importancia de lo que somos y representamos en este país, esa es una tarea conjunta y de unidad a favor del desarrollo socioeconómico de nuestra región.
Exijamos al unisonó que se nos de una carretera acorde a nuestra importancia, ni más ni menos, una autopista moderna que permita una comunicación como debe ser, al gobierno nacional debemos exigirle que tome la decisión urgente de solucionar este problema, desde ya llamamos a todos los sectores para que por todos los medios posibles nos hagamos escuchar, solo haciendo de este problema una causa común de nuestra ciudad y nuestro departamento, tendremos la oportunidad de ser escuchados, no cabe duda, este problema es una buena oportunidad de mostrar nuestro amor por nuestra tierra y la unidad que podemos lograr cuando de luchar por su mejoramiento se trata.
